lunes, 12 de mayo de 2008

El lado correcto del espejo

Comenta Neil Gailman en boca de uno de sus personajes que "conducir en América es como conducir por el otro lado del espejo".
Supongo que esa referencia intenta decir cómo está de arraigado el personaje como hijo de la Gran Bretaña que es, tal vez para mostrar un poco de su personalidad.

En fin, a lo que iba, que independientemente de lo que quiera decir realmente esa referencia (lo mío nunca han sido las cosas de leer ;P ), es el mundo colonial el que está al otro lado del espejo...y me he puesto a pensar...

Bien, Henry Ford nació, creció y creó su emporio en los EEUU, donde conducen como personas civilizadas (;-P), aunque no fue él quién creó el primer automóvil, sino Karl Benz 24 años antes. Aunque Karl Benz no se posicionó en qué lado era el correcto (lo puso en el centro) sí lo hizo Ford, personaje involucrado en la evolución del mundo civilizado.

Ahora bien, teniendo en cuenta todo eso...¿cómo fue que en el Reino Unido y sus colonias se le dió a todo la vuelta?

De ahí que me imagine en 1885, a Sir. Carbide, en su lujosa mansión de Bloomsbury, recibiendo uno de los primerísimos modelos híbridos entre coche y carro de tiro, ordenándole a su encargado de cuadras que se las ingeniara de alguna manera para situar el mando del vehículo más hacia la izquierda, que un hombre de su posición no iba a permitir que le azotaran simples lacayos simulando hacérselo a sus caballos.
El pobre hombre, después de varios intentos, en los que casi pierde el empleo y su mano derecha, y haciendo gala de todo su ingenio y de sus conocimientos como aprendiz de relojero consigue aproximar el mal llamado volante hacia donde su amo dijo.

Unos cuantos años después, cuando sus vecinos comienzan a recibir los primeros modelos de Benz le piden al encargado de las cuadras de su vecino que haga lo mismo, Sir Carbide lo hace encantado, relamiéndose por el gran número de fiestas a las que va a ser invitado (aunque se le reconoce como un apuesto caballero él se teme que haya pasado su momento de resultar un buen partido para las damas).

Cuando los primeros modelos del Ford-T llegan al Reino Unido, el mercado potencial con el que se encuentra se niega a aceptar un volante en esa posición...¡imposible! con todo el esfuerzo que les ha costado conseguir manejar ese extraño carromato, como para que pretendan ahora volverles a enseñar. El encargado de Sir Cadbury hace años que dejó la mansión (ahora hogar de una enorme familia) para establecerse y fijar su primera cuadra para coches...la denomina "taller" (habráse visto...)

...el mozo se llamaba
Lionel Martin, y gracias a él comenzó la fabricación de la gama de lujo de estos vehículos (Aston Martin), ideados sólo (en principio) para los más grandes hijos de la Gran Bretaña...


5 comentarios:

Anónimo dijo...

A mí me sonaba algo de carruajes, como que a la hora de ir por un camino la tradición decía hacerlo por un lado y demás, y cuando empezaron a motorizarse los caballos (vamos, que los tuneaban en plan cyborg) pues mantuvieron ese rollo para el volante.

Digo yo vamos... tiene sentido. Si alguna vez voy al pasado, si puedo me acerco y le pregunto en persona xD

Del dijo...

Sí, lo de este post podría ser una alternativa, cualquier cosa en realidad, pero si vas al pasado, en lugar de preguntar por mi, llévame.

Ey, creia que habias abandonado tu cruzada personal de "no hay post sin respuesta", XDD, gracias por tus respuestas, (concedido Premio del lector del mes)

Anónimo dijo...

Bieeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeen <:o) Qué feliz soy, hacía que no me daban un premio xD Aunque debería ser de lector-escritor, que sino los padres de la Programación Concurrente se enfadan con la nomenclatura.

PD: En la alfombra del tiempo de Doraemon (y tb la de Arale) cabe más de una persona, así que tranquila.

Lechuck dijo...

La explicación de por qué se puso el volante a la izquierda es muy buena xDDDD ¿Tendrían entonces la menor idea sobre la repercusión que iba a suponer su invento para el mundo? Aunque supongo que el automóvil es una de esas cosas que tenían que ser inventadas tarde o temprano, siendo más importante el cuando se inventó que el quién lo hizo.

No puedo dejar pasar la referencia al otro lado del espejo, que evoca (por lo menos a mí me parece) al país de las maravillas de Alicia. Comparando a América con un nuevo mundo en el que todo es una caricatura de la vida real. Que creo es justo el sentimiento que imperaba en Inglaterra en esa época.

Del dijo...

Si, tienes razón Lechuck, pero no sólo inventos, desde movimientos filosóficos a leyenda urbanas, las cosas pequeñas se tornan rápido en grandes.
Si no se hubiera inventado el coche, tal vez habríamos acabado desplazándonos en calabazas con ratoncitos (para seguir las referencias a cuentos famosos).